El paro registrado en Euskadi bate otro récord, con 164.139 inscritos en Lanbide

Otra nueva marca para la crisis. El paro registrado en Lanbide –Servicio Vasco de Empleo– alcanzó en el mes de septiembre las 164.139 personas, una cifra sin precedentes desde finales de la década de los ochenta, tras crecer en algo más de 4.000 personas, el 2,51%. Una vez más durante este año, el alza es superior a la media nacional, donde el incremento fue el 1,72%, lo que situó la cifra nacional de desempleados inscritos en las listas de los servicios públicos de empleo en 4.705.270. En este caso se trata de un volumen inferior al alcanzado en febrero y 45.000 personas por debajo del récord logrado en el pasado mes de marzo.

En el último año, el alza de la cifra de desocupados en la comunidad autónoma vasca ha afectado 22.233 personas, lo que supone un incremento del 15,67%, claramente por encima de los registros nacionales, donde el alza ha sido del 11,32%. Pese a todo, la tasa de paro está muy por debajo de la media nacional. En concreto, la Encuesta de Población Activa (EPA) arroja para España una tasa de desempleo del 24,63% y para Euskadi del 14,56%.

El paro sigue siendo un problema del sector servicios, que concentra casi dos terceras partes del total, con 103.541 personas. También ha sido el segmento que más se ha deteriorado, al concentrar casi la totalidad del alza, con 3.521 de los 4.014 nuevos desocupados. La industria sumaba al acabar el pasado mes casi 25.000 desempleados y la construcción, algo más de 19.000.

Por territorios, Álava se anotó el mejor comportamiento, con un alza del 1,63% –inferior a la media nacional–, mientras que Gipuzkoa fue el peor, con el 2,76%, frente al 2,63% de Bizkaia. Sin embargo, en términos interanuales sucede todo lo contrario y la peor evolución corresponde a Álava y la mejor a Gipuzkoa, aunque con diferencias apenas significativas en los porcentajes.

El desempleo anotado en las oficinas de Lanbide se reparte casi al 50% entre hombres y mujeres, aunque éstas los superan ligeramente, con casi 84.000 personas, frente a los poco más de 80.000 varones. Los menores de 25 años en esa situación sumaban 13.452, el 8,2% del total

Lanbide destina un millón de euros al programa de formación y trabajo para jóvenes Hezibi

250 alumnos que podrán obtener su titulación mientras trabajan en empresas vascas.

El Servicio Vasco de Empleo (Lanbide) ha aprobado una partida económica de un millón de euros para el programa Hezibi de formación y trabajo en alternancia dirigido a jóvenes vascos.

Esta iniciativa es pionera al desarrollar un modelo mixto para estudiantes de Formación Profesional (FP) y jóvenes desempleados. Su objeto es la mejora de sus competencias profesionales mediante la obtención de un certificado de profesionalidad (CP) o de un título de FP en régimen de alternancia con la actividad laboral retribuida en la empresa.

De esta manera, Lanbide financiará el coste de la formación asociada al correspondiente certificado de profesionalidad, mientras que el Departamento de Educación asumirá el coste de la formación asociada a los títulos de Formación Profesional.

La aprobación de un proyecto formativo en alternancia dará lugar a la concesión de una subvención de 3.000 euros al centro de formación que cumpla los requisitos marcados por esta convocatoria para la impartición del certificado. Ese dinero se destinará a la financiación de las actividades de intermediación, gestión y tutoría desarrolladas por el beneficiario del proyecto formativo.

Cuando el objetivo del programa sea la obtención de un titulo de Formación Profesional, el alumnado deberá estar previamente matriculado en un ciclo de Formación Profesional e Inscrito en Lanbide.

La oferta de Hezibi en FP ya ha sido lanzada coincidiendo con el arranque del curso académico en septiembre y ha cosechado un gran éxito entre el alumnado vasco. Un total de 31 centros de formación profesional tutorizarán la experiencia de más de 250 alumnos que podrán obtener su titulación mientras trabajan en 144 empresas ubicadas en Euskadi, como Leroy Merlin, Fagor Arrasate, ITP o Danobat.

Actualmente los candidatos propuestos por los centros educativos participan en entrevistas laborales con vistas a que antes de finalizar el primer trimestre puedan firmar el contrato de formación y aprendizaje que les vinculará a las empresas. Se trata de un contrato con una duración mínima de un año y máxima de dos que reúne todas las garantías, y obligaciones, de cualquier otro acuerdo laboral. Para poder beneficiarse del mismo es necesario tener un mínimo de 16 años y un máximo de 30.